Una relevante investigación se ha realizado desde 1982 hasta éste año en la Universidad de Alabama en Birmingham por el Bioestadístico David B. Allison al estudiar los cambios de peso corporal en cerca de 20,000 animales que incluyen desde primates y cobayas empleadas en estudios experimentales hasta perros, gatos y ratas comúnes.
Dicho investigador ha demostrado que estos animales han venido aumentando de peso a pesar de seguir la misma dieta y actividad física desde ése año hasta la fecha. Las cifras han mostrado una fuerte tendencia a la alza ponderal principalmente en chimpancés y ratones. Allison apunta a determinados factores tales como toxinas o sustancias todavía desconocidas en el agua potable y que afecten al sistema endocrino de los animales o ciertos microorganismos patógenos, generalmente de tipo infeccioso los cuales alteran el metabolismo de los mamíferos.
Se han manifestado otras opiniones, como la que se refiere al poco espacio que cuentan las jaulas, cada vez más hacinadas por animales, lo cual limita la actividad física, sin embargo tal hipótesis no es del todo convincente.
Se esperan nuevos resultados de tan interesante estudio.