Fue en 1872 cuando en la región de Paraiba, Brasil fue descubierta una extraña piedra que presentaba una inscripción de 8 líneas cuyos caracteres no pertenecían a las culturas de América del Sur, 2 años después, investigadores brasileños trataron de descifrar el enigma pero no pudieron, tuvieron que ser eruditos alemanes (¿quiénes más?) los que llegaron a la conclusión de que se trataban de caracteres fenicios, al parecer, la piedra se perdió pero quedó la inscripción en forma de copia.
En Estados Unidos, un investigador llamado Cyrus H. Gordon está de acuerdo que lo escrito en dicha piedra es de orígen fenicio, dados sus rasgos así como caracteres. Se dice que los navegantes fenicios en remotos tiempos llegaron a las Azores y que pudieron llegar más allá de estas islas. Concretamente, el texto de Paraiba habla de una catástrofe que le ocurrió a una tripulación que consistía en 10 naviós, los cuales fueron destruidos casi en su totalidad por una tempestad, Yazid, el escriba, relata lo sucedido así como las peripecias que tuvieron que realizar para quedar con Vida y llegar, supuestamente, a costas brasileñas.
En base a estas descripciones, numerosos filólogos en todo el Mundo, se han dado a la tarea de investigar el orígen de esta extraña inscripción sin llegar a un acuerdo unánime. ¿Será que los fenicios llegaron al Nuevo Mundo y se asentaron en colonias las cuales están todavía por descubrirse, dando pauta a una incipiente civilización en estas inhóspitas tierras?. Muchos pseudoinvestigadores creen que la Historia sigue una línea recta, intocable, sin cambios, como nos dicen los libros escolares y eso es FALSO.