Filipeo era un edificio dentro del Altis de Olimpia. Era un monumento circular de Orden Jónico elaborado de Barro Cocido, ladrillos y piedras con columnas a su alrededor. Fue construido por Filipo II después de la Batalla de Queronea. En él se encontraban las estatuas de Eurídice, Olimpia, Amintas así como las del mismo Filipo y su hijo, Alejandro Magno.
Todas ellas eran de Oro y Marfil. Esta considerada como la única estructura del Altis de Olimpia dedicada a humanos los cuales eran considerados por el pueblo griego como héroes o semidioses.