El jabalí, en este período dinástico, se consideraba como un alimento que acompañaba a los difuntos en el Más Allá. Era símbolo de Abundancia en la Otra Vida. Aquí tenemos un excelente trabajo realizado en Cerámica y partes en Porcelana de un robusto animal. Sale sobrando hacer la descripción detallada del mismo salvo 4 puntos claves:
1.- La fiel representación del jabalí desde el punto de vista anatómico. 2.- Las perfectas proporciones descriptivas del mismo. 3.- La todavía conservada coloración anaranjada que cubre la escultura y 4.- La excelente ornamentación que manifiesta la superficie de la obra. Se corresponde a la Dinastía Han.