Constituida en una influencia determinante en la arquitectura del Primer Barroco en el Sur de Alemania, esta iglesia esta considerada la más grande desde el punto de vista renacentista al norte de los Alpes. Localizada en Munich y edificada por el Duque Guillermo V de Baviera fue el centro espiritual de la Contrarreforma. El templo fue erigido en 2 tiempos: el primero, de 1583 al 88, se levantó con una bóveda de cañon, la segunda etapa correspondió a la erección de un nuevo coro y un trasepto. La fachada es enorme, ricamente decorada con estatuas de los miembros de la dinastía Wittelsbach.
El retablo mayor contiene numerosas pinturas sobre todo, la de un ángel derrotando a los ángeles caídos. Su interior es opulento, bello con gran riqueza escultórica y decorativa. Presenta columnas gruesas de frentes articulados por pilastras pareadas La cripta alberga tumbas de la dinastía Wittelsbach. La iglesia de San Miguel es una de las más hermosas construcciones erigidas por los jesuitas.