Desde hace aproximadamente 10 a 12 años, se ha venido haciendo patente un singular fenómeno que consiste en la aparición en lengua castellana de diversos artículos y por ende, libros, acerca de las supuestas condiciones paranormales, religiosas, ovnilogicas, forteanas, etc, etc., que recorren cada uno de los lugares de las distintas provincias españolas. Es por demás obvio que los autores son desconocidos o muy jóvenes retratistas de las “condiciones extrañas” que se albergan en la Península Ibérica. Esto es chocoso y muy pero muy tendencioso, no es posible que cada región o provincia española albergue misterios que deban ser investigados profusamente. Las supuestas apariciones marianas, fenómenos aéreos inexplicados, fantasmas, etc, son fenomenología que debe ser considerada con toda seriedad, no ser manejada al azar como cualquier cosa que se aparece a cualquier hora del día y al deseo del autor. Creer que Sevilla, Barcelona, Madrid, Bilbao y otros sitios son asiento de extraordinarias manifestaciones de fenomenología extraña tiene visos de estar muy alejada de la realidad, de hecho los autores tratan de vender su producto queriendo impactar a un público todavía creyente en forma desorientada de todo aquello que huela a inexplicable. Bajo ningún aspecto es recomendable tomar en serio esas lecturas, incluso, recomendaría ni siquiera tomarlas en cuenta ya que se maneja la temática en una forma banal y ligera, además de tendenciosa.
Quedaron atrás esos magníficos días en que el Maestro Juan García Atienza, haciendo gala de esa brillante inteligencia y erudición que siempre lo caracterizaron, nos deleitaba con sus profundos y rigurosos estudios de esos temas, que al día de hoy, se manejan con desfachatez y sin un real compromiso intelectual de por medio.