Con una datación de 1,500 años A.D.C. esta obra muestra una figura muy primitiva en formas ya que básicamente consiste en un macizo conglomerado de Jade, de aspecto rechoncho, con una línea lateral divisoria así como una forma ovalada que, presumiblemente, se corresponde a la Cabeza.
No existen rasgos finos ni morfológicamente destacables, sin embargo, es una muestra palpable de los inicios de lo que sería el Arte de una de las culturas más prestigiosas del Mundo.