Esculpido en Bronce, este batracio se constituye en un trabajo impecable ya que las fantásticas rugosidades que presenta en la superficie corporal guardan un realismo muy especial que lo hace diferenciarse de otras esculturas de su tipo. Las Patas son largas y grandes, palmeadas las Inferiores y la Cabeza esta bastante proporcionada con el resto del Cuerpo, el Hocico está abierto como si el animal estuviése presto a capturar una presa o a croar.
La mirada es expresiva y el anfibio pudiese estar también presto a saltar y/o huir. El acabado muestra un fino color Dorado. Magnífico desarrollo del trabajo.