Esta es considerada una escultura perdida del Maestro, quizás copiada de una anterior cuando el escultor, siendo todavía un joven, se encontraba en el palacio de su mecenas, el mítico Lorenzo el Magnífico. Esta Obra representa la Cara de un fauno con su expresión característica que pudiése corresponder a maldad, burla o alegría. Realizada en Mármol, encontramos en ella unos Ojos muy expresivos, rasgados que acompañan al contexto facial, con Nariz de características aguileñas y Fosas Nasales prominentes.
La Boca es grande, en donde se observan algunos dientes, presenta un Bigote que da pauta a una Barba cerrada. Las Comisuras Labiales se encuentran perfectamente trabajadas. Las Orejas son grandes y simétricas, y además, es notoria la presencia del ceño fruncido y lineas faciales correspondientes a arrugas. En esta época, con el apoyo de Lorenzo el Magnífico, el Maestro obtendría las bases de lo que sería su monumental, excleso e increíble desarrollo artístico.