Esculpida en el siglo XVII, esta figura de un dragón quizás represente la manifestación más emblemática del Arte Chino ya que esta criatura se encuentra presente en todos los ámbitos artísticos de esta vasta cultura. Realizada en Bronce y correspondiente, también como la anterior, a la Dinastía Ming, muestra a un animal discretamente estilizado, con patas fuertes y en franca actitud de desafío, Hocico abierto mostrando sendos colmillos y en la parte correspondiente al lomo, se observan las crestas o espinas que le dan la característica definitiva a dicha representación.
En la parte inferior de la Cabeza se observan pliegues que van hacia el Lomo. La Cola esta levantada lo que muestra la agresividad del animal. A pesar del evidente paso del tiempo que se logra observar en la superficie de este trabajo, las formas originales se mantienen como tales. Peso de 512 gramos. Altura de 10 centímetros, largo de 12 y ancho de 5.