Localizadas en Ariége, Francia y correspondiendo al Periódo Paleolítico Superior en el Magdaleniense Medio, estas magnificentes esculturas representan a uno de loa animales más emblemáticos de ese período: el bisonte. Aquí el o los artistas dejaron a un lado el trabajo con materiales duros tales como la piedra y se inclinaron hacia el manejo de la arcilla o barro para la creación de estos espléndidos modelos. Aunque sometidas a la inclemencia de las condiciones ambientales y el tiempo ya que presentan líneas de resquebrajamiento en la superficie de sus cuerpos, las esculturas muestran la esencia de la forma zoomorfa cuasi totémica de estos gallardos bovinos: cuerpos robustos, compactos, patas bien delineadas, ojos y orificios nasales conservados así como lo que trata de representar pelo y barbas estilizadas. En la presencia global, uno de ellos parece subir una hipotética pendiente. La longitud de la escultura mejor conservada es de cerca de 32 pulgadas.
El conjunto de elementos se encuentran integrados a un bloque que quizás abarco otras esculturas, desafortunadamente, no conservadas por el tiempo. Los hombres paleolíticos pudieron plasmar perfectamente estas formas utilizando materiales más blandos y maleables Se encuentran datadas en 13,000 a 10,000 años A de C,