Estas esculturas trabajadas en Marfíl, corresponden a una imágen idealizada, estilizada -volvemos a utilizar ese término- que se asocia con la eterna figura femenina. Aquí sobresalen los enormes senos, a comparación de la figura principal, que pretenden interpretarse como lactantes. No existen marcas o huellas de trabajo de adornamiento en la pieza básica, muestra, eso sí, las huellas del tiempo.
Además la parte que está por encima de los senos es más delgada que la inferior y termina en punta. Se encuentran en el Moravian Museum, en la República Checa y su altura oscila, la izquierda, en 8.3 cms. mientras que la contralateral mide aproximadamente 8.6 cms.