Progresion21 – La mente es como un paracaídas, funciona cuando está abierta La mente es como un paracaídas, funciona cuando está abierta
Heinrich Khunrath es considerado como un nombre de gran influencia dentro de la Gran Tradición occidental. Para algunos, nació en Leipzig, para otros en Dresden en el año 1560, se comenta que durante su vida estudiantil uso varios nombres y apellidos como es el de Henricus Conrad. Se graduó en Medicina en Basilea, Suiza. Fue discípulo de Paracelso el cual influyó en una forma decisiva en sus ulteriores estudios e investigaciones. Viajó a Hamburgo, Colonia, Praga. Austria y otros lugares. Desarrollo lo que se llama Magia Natural Cristianizada.
En 1609 publica su obra cumbre “Amphitheatrum sapientiae aeternum”, un magistral trabajo en el que confluyen vastos conocimientos alquímicos, cristianos y cabalísticos así como la manifiesta división de esta obra en 2 partes: la primera, mística, en donde se obtiene el VERDADERO CONOCIMIENTO del Libro de la Sabiduría, y la segunda, jeroglífica, expuesta en 12 magníficas planchas en las que se expone el Misterio de la Ascención y la interminable búsqueda del Camino y la Verdad entre otras cosas basadas en el estudio hermético, se considera que de esas 12 planchas, 9 son un magistral resumen gráfico de la Tradición. Así, el extraordinario Michel Maier, Robert Fludd, Iraeneus Agnotus y otros fueron infatigables estudiosos de los trabajos de éste magnificente hermetista, Se dice que en sus obras “encerro” la sabiduría incluida en La Tabla Esmeraldina de Trismegistus, El Libro M. de Paracelso y la tumba de Christian Rosenkreutz. Khunrath, espiritualmente, se encontraba inmerso tanto en el estudio del Cristianismo como de la Kabbala por lo que incluyo en su obra al Triple Ternario que es la Trinidad manifestada en los 3 mundos -Intelectual, Astral y Moral -. Una referencia curiosa del hermetista es que consideraba a la Kabbala semejante al Algebra ya que ambas presentaban sus ecuaciones y vocabulario técnico propios.
Para Francis Yeats, el alemán era un eslabón entre la filosofía de John Dee y el Rosacrucismo. Fue un connotado alquimista y existe hasta nuestros días la fuerte convicción que fue un destacado rosacruz. Como siempre sucede con este tipo de estudiosos, murió el 9 de Septiembre de 1605 en la más completa de las miserias.
