Progresion21 – La mente es como un paracaídas, funciona cuando está abierta La mente es como un paracaídas, funciona cuando está abierta
B. Ann Slate ha sido un nombre poco recordado dentro del campo de la investigación SERIA del importante, siempre elusivo y poco comprendido Fenómeno Ovni y su conexión con el campo de la fenomenología conocida como de Alta Extrañeza. Esta importante investigadora centro sus estudios en la conexión Big-Foot- Mutilaciones de Ganado- OVNiS durante la década de los 70´s, encontrando una compleja y muy extraña relación de hechos. En su momento, su amplia capacidad de investigación de estos acontecimientos estudiados en relación a esta perturbadora fenomenología la llevaron a pensar que además estuviese involucrado el propio gobierno estadounidense con grupos específicos de tarea al estar probando armas secretas de gran envergadura basadas en el láser así como el manejo de gases paralizantes. En sus relatos publicados en diferentes revistas y magazines en la Unión Americana, Ann Slate describía con lujo de detalles sus pesquisas en los ranchos y praderas norteamericanas en busca de una solución a este intrigante misterio, llama la atención sus descripciones de extrañas entidades humanoides que se hacían presentes en los sitios de matanza: altas, muy delgadas, de cara pálida, vestidas con extraños uniformes las cuales pudiesen estar vinculadas a algún programa secreto de la milicia yankee.
Siempre estuvo preocupada de porque el gobierno no le daba la debida importancia a este extraño fenómeno cuando las muertes de animales a lo largo de su país eran por cientos. En cuanto al fenómeno del Pie Grande, también lo conectaba con las muertes de ganado, dando un giro de paranormalidad al hecho. B. Ann Slate, cuyo nombre real fue el de Bárbara Gironda tuvo una importantísima relevancia en el estudio moderno de estos extraños hechos, junto con Roberta Donovan, se constituyeron en las 2 mujeres más importantes comprometidas con desentrañar el misterio de las matanzas de ganado en las praderas estadounidenses. Desafortunadamente, Slate murió repentinamente en 1979 dejando un legado inconcluso de misterio y a la vez de decepción.
