Estas están consideradas las más masivas y brillantes de todas las estrellas de las galaxias. Se forman dentro de las llamadas Nubes Obscuras o Moleculares, cuya densidad provocada por la acumulación de Polvo Interestelar opaca a la luz de los alrededores. Recientemente, el telescopio milimétrico de Atacama de la Agencia Espacial Europea, ha seguido de cerca la transformación de una de ellas, localizada en la Nube Obscura Spitzer 335-579-0.292, a 11,000 años de distancia.
Por primera vez se ha observado el movimiento del polvo y el gas al momento de esta transformación, cuyo núcleo, conocido también como “embrión estelar” tiene al menos 500 masas solares, un verdadero gigante que eventualmente colapsará hasta formar una estrella de 100 masas solares. Estas estrellas se constituyen en uno de los misterios más profundos del Universo y han sido continuamente monitoreadas por los astrónomos para desentrañar sus secretos.