Tal vez una de las representaciones escultóricas incipientes, de gran antigüedad encontrada en el Egipto Prefaraónico, es ésta que ha sido llamada simplemente como “Idolo femenino”, datada en cerca de 6,000 años a.de C. fue hallada por un egiptólogo francés Luc Watrin en una colección particular en París. El objeto es una sola pieza de basalto gris de grano muy fino, tallado cuidadosamente, poseyendo una forma de barril, de 18 cms. de largo por 10 de ancho, compacto, de formas voluptuosas. En la parte superior, en donde presumiblemente se encuentra la cabeza se hallan 2 agujeros parecidos a ojos y una estructura semejante a una nariz recta. En la parte media, aparecen unas formaciones que pudiésen interpretarse como senos estilizados.
Para los investigadores, esta sería una de las primeras representaciones de la Diosa Madre con un gran significado en la primigenia manifestación artística de este extraordinario pueblo. Un importantísimo hallazgo realizado en los últmos años.