En la Baja Galilea, en el año 2008, fueron descubiertos 3 interesantísimos cráneos esculpidos e incluidos en argamasa con las imágenes de los difuntos las cuales servían como guía para sus deudos. De acuerdo a los estudiosos, estos cráneos corresponden al periódo Neolíotico Precerámico Periódo B. La datación gracias al radiocarbono 14 arroja una antigüedad de 8,000 a 9,000 años, lo que demuestra la sofisticación de los cultos funerarios en una época tan primitiva. De acuerdo a la tradición, los cráneos se enterraban en una zona distinta a donde se encontraban los otros huesos. Tanto en Siria, Jordania y Turquía se seguía este patrón de enterramiento.
Un dato interesante es que desde ese descubrimiento ha habido importantes hallazgos en la zona de Yiftah, lo que refuerza la sospecha inicial de los arqueólogos, de que el sitio constituye un importante yacimiento de restos óseos del Neolítico.