Mucho se ha hablado en nuestro país sobre la presunta visita de Benedicto XVI para el primer trimestre del próximo año. Es de todos sabido que la Iglesia Católica sufre un tremendo cisma en cuanto a credibilidad se refiere, ya sea por corrupción, tráfico de influencias, pederastía u otro terrible hecho; sin embargo algo que se ha mantenido al margen de toda publicidad es el pasado nazi de éste supuesto “pontífice”. Cuando llegó al trono del Vaticano, investigadores israelís y británicos se dieron a la tarea de desvelar tan obscuro pasado. El Papa actual formó parte de las famosas Juventudes Hitlerianas, enrolándose en el ejército nacional-socialista siendo mandado poco tiempo después a la la frontera austro-húngara, según se cuenta por parte de sus defensores, desertó y entró en el semnario para dedicarse al lucrativo negocio de la carrera eclesiástica sin embargo dadas sus condicones poco liberales y ultraconservadoras, es casi un hecho que haya tenido el suficiente adoctrinamiento por parte de los nazis cuando llegáse -a cualquier nivel- del poder clerical.
Se quiera o no, éste es ótro de los ríspidos capítulos dentro del tenebroso mundo de la Iglesia Católica, sin embargo, a pocos les importa en nuestro apesadumbrado país, que está ansioso de que “algo” o “alguien” lo pueda sacar de éste terrible agujero en que se encuentra.