Parece ser que un velo de incertidumbre y preocupación cubre las esperanzas latinoamericanas en éste demasiado incipiente 2020. La inconformidad chilena, la peligrosa situación boliviana, las inquietudes sociales de Ecuador y Colombia, la crísis venezolana y los nuevos gobiernos en Argentina y Uruguay son un desafío para la Geopolítica de esta zona del Mundo, aunado a esto, la liberación de Lula Da Silva en Brasil seguramente traerá problemas al neoliberal Bolsonaro, sin embargo, creo que son, principalmente, la corrupción, la destrucción sistemática y brutal del Medio Ambiente y la intervención yankee en la región los que causarán peligrosas condiciones de inestabilidad en la región.
Un hecho muy relevante es el que los pueblos originarios principalmente de Chile, Argentina y Bolivia han levantado su voz como nunca durante el año pasado, reivindicando su derecho a ser escuchados y no ser más explotados ante un modelo socio-económico que ha beneficiado a tan solo a algunos cuantos. Considero que la intervención de los gringos -como siempre- será determinante para saber que dirección tomara nuestra América Latina en este año que apenas empieza.