……….el autor se desborda en optimismo al decir que estos países tendrán una revolución gracias al conocimiento y la tecnología dada a estos jóvenes emprendedores, sencillos y seguros de sí mismos.
COMENTARIO
Hace años leí este libro y lo retomé hace algunos meses. No se necesita ser ecónomo ni analista financiero para considerar lo siguiente: el autor ha sido periodista y miembro del gobierno francés de esos años. También analista. Y si bien es cierto que comenta que los ordenadores destaran fuerzas traumáticas en el plano económico de aquellos años, también NO ES CIERTO que “…..guiará al artista a la invención….”. Existe un punto en que Servan comenta que los yankees pierden el liderazgo en tecnología, en relación con Japón, por financiar investigación. ¿Como es posible esto? ya que SIN CONOCIMIENTO O INVESTIGACION NO EXISTE TECNOLOGIA. A pesar de lo anteriormente citado, considera -con miedo- que Japón se pueda convertir en el país número 1, en una potencia tecnológica, mientras que los gringos se instalan en países pobres para pagar salarios bajos o si se quedan en su país, importan tecnología japonesa lo cual considera un riesgo. Por otra parte, su intención, en esos años, de que todo el mundo sepa manejar una computadora es controversial, veamos: en la India siempre han existido hasta el 2019 millones de jóvenes que nunca recibieron, reciben o recibirán algún tipo de educación (en 1986-87 existían 250 millones de niños en esas condiciones), ¿que se hace con ellos?: MANO DE OBRA BARATA, sin embargo, este país ha evolucionado económicamente en parte así como China pero con millones trabajando y sin educación. Si al Tercer Mundo se refiere, tan solo en Brasil en 1987 existían millones de jóvenes analfabetas. Sobre Africa, diré que la situación no ha cambiado desde hace siglos, ha sido saqueada, ultrajada, martirizada antes, por europeos y yankees, ahora por chinos, árabes, hindúes y los demás países de siempre. Para Servan, las computadoras sacaran a Africa del abismo en que se ha encontrado durante toda su historia; pero lo más llamativo es que estos jóvenes tercermundistas implantarán en sus países la satisfacción de las necesidades humanas, la capacidad creativa, la libertad de escoger, etc, etc. Pregunto, ¿acaso de podrá lograr esto con los colonizadores y ahora neocolonizadores de los países latinoamericanos, asiáticos y africanos?. Para finalizar solo diré que este autor más bien parece un agorero de alguna empresa o secta manipuladora…….¡Ah!, y además odia al desarrollo económico soviético. A los franceses hay que tomarlos con pinzas, más si se habla con ellos de Economía, Política (Derechos Humanos) y Religión.