Uno de los aspectos más interesantes que han surgido de los estudios que ha realizado la NASA en cuanto a los efectos de la gravedad en los seres vivos que se han desplazado hacia el Espacio es el de como afecta la Microgravedad a las bacterias. Desde hace más de un año, a principios del 2014, se ha confirmado gracias a estudios previos realizados desde hace aproximadamente más de 10 años por la agencia estadounidense correspondiente y universidades diversas, que sin presentarse Gravedad los microorganismos se vuelven más virulentos. Bacterias tales como Salmonela tienen la capacidad de “burlar” prácticamente al Sistema Inmunológico y producir enfermedad más intensa que si la bacteria estuviese en contacto con la Gravedad Terrestre.
Esto se debe básicamente a la reconocida capacidad de adaptación que tienen estos microorganismos a condiciones desfavorables del medio que las rodea. Cuando en la Tierra, las bacterias son expuestas a factores que ponen en riesgo su vida como cambios de temperatura, hambrunas, etc, etc estas, activan una serie de sustancias proteicas que se encargan de protegerlas de daños, y entonces se hacen más resistentes, así, un fenómeno similar sucede con la Microgravedad, pues la detectan como un factor más de riesgo. Falta mucho para desentrañar el misterioso mundo de los microorganismos (virus, bacterias, hongos, etc, etc), unos seres que han vivido en el planeta desde antes de la aparición del Hombre y que, seguramente, serán testigos de la desaparición de éste sobre la faz de la Tierra.