Un satélite de la Nasa orbitando al Sol encontró en el 2012 una enorme y larga grieta sobre la superficie solar de aproximadamente 800,000 kms. Al parecer, no se manifestaron consecuencias para nuestro planeta. El año pasado, entre el 29 y 30 de Septiembre fue encontrada otra nueva grieta sobre la superficie de la Corona Solar pero ahora de cerca de 320,000 kms. de longitud. El Observatorio de Dinámicas Solares de la NASA considera que este tipo de fenómeno es normal y siempre sucede después de una potente erupción del astro rey.
Estas grietas afectan a zonas cuyas temperaturas son menores pero que poseen una gran actividad electromagnética, por estas razones, lo expertos creen que se deben a la acumulación de gas espeso y frío sobre la superficie del Sol. Los último reportes dicen que las grietas siguen creciendo y se desconoce su real efecto tanto en el astro como en nuestro Sistema Solar a breve, mediano y largo plazo.