En el siglo pasado, específicamente en la década de los 70´s, un gran intelectual francés, anarquista, filósofo, sociólogo, miembro de la Resistencia Francesa y teólogo llamado Jacques Ellul escribió sobre la Guerra Psicológica comentando que era una forma política, habitual y pacífica practicada por todas las naciones con la finalidad de constituirse en una agresión indirecta. Ahora en pleno siglo XXI, el siglo de las maravillas tecnológicas, del próximo viaje a Marte, de las Redes Sociales y de la preocupante y creciente estupidez e ignorancia, las Grandes Potencias se han dedicado paciente y cuidadosamente a estudiar el comportamiento del autonombrado Homo sapiens para explorar uno de sus lados más obscuro: el Miedo.
Sabiendo de su fragilidad y con el surgimiento de una forma vírica modificada genéticamente, exacerbada su virulencia por el Cambio Climático y las condiciones vitales del individuo, hoy, iniciando el 2022, después de más de 2 años enfrentándose al Gran Enemigo, las condiciones parecen ser iguales: cubrebocas, aparente sana distancia, confinamiento, trabajo en casa y una por demás dudosa vacunación. El bombardeo informático -o desinformático- mediado por los Grupos de Poder ha traído en jaque a la población mundial, si bien es cierto de la afectación viral real, persistente y cambiante también es cierto que los medios de “información” difunden noticias falsas, tratamientos inexistentes e inciertos, esperanzas fallidas, incertidumbre y ese mismo miedo:
quédate en casa, consume mucha chatarra para que te enfermes de otros trastornos, aumenta de peso, compra, compra, compra, inquiétate, preocúpate y sobre todo, prepárate para lo que esta por venir.