La Cultura Badariense, que se desarrollo en el Antiguo Egipto a finales del V milenio A.de C., daría orígen a un género que poco después tendría una época de gran esplendor y que se representaría, aún, en el Periódo Faraónico; de su material escultórico, llama la atención el grupo de los llamados Idolos Femeninos de los cuales mostramos esta imágen. Con una altura de 14.3 cms, podemos observar una estatuilla tallada en marfil que representa a una Diosa Madre, aunque no tan voluptuosa como algunas otras representaciones, observamos en ella una cara grande, en proporción al cuerpo, ojos expresivos, nariz gruesa de aspecto negroide además de una boca por demás simplificada, el cuerpo es delgado y los brazos caen sobre las caderas, los senos son alargados y en la vista lateral se alcanzan a observar discretamente protuberantes. no se encuentra definido el ombligo y la parte más llamativa es el triángulo púbico el cual se halla aparentemente decorado con trazos cuadriculados como si de alguna manta o tela se tratara, las piernas son gruesas sin angulaciones y los pies pequeños. La coloración es amarillenta, quizás por el paso del tiempo. Es un ejemplo completamente diferente a las imágenes conocidas de representación de Diosas-Madres.
Se encuentra actualmente en el Museo Británico de Londres.