Progresion21 – La mente es como un paracaídas, funciona cuando está abierta La mente es como un paracaídas, funciona cuando está abierta
Salvador Dalí siempre tuvo una profunda devoción por el lugar que lo rodeo desde niño: el Mar, la Costa de Cadaqués, Portlligat, el Cielo, la Arena, la Brisa Marina en sí, su medio su entorno y sobre todo los Recuerdos, los Perturbadores Recuerdos. En la presenta manifestación artística – óleo sobre tela, 58 cms. X 79 cms. Actualmente en el Museo Dalí de San Petersburgo, en Florida, USA. Fundacion Reynold Morse. 1950 – encontramos un bello paisaje, precisamente de Portlligat, el cielo, contrastante, entre un discreto azul cubierto de nubes, algunas de ellas dispuestas en cúmulos y amenzando lluvia,sin embargo el Sol se deja entrever, enviando sus rayos al exterior. Existe una claridad marcada en el centro del Cielo. en el horizonte, el límite del mar y más cerca sobresaliendo morros, formaciones rocosas, de contrastante color, el Mar se aprecia claro,discretamente azulado en el que se refleja el brillo de la luz solar, no se aprecian olas y en el acantilado se encuentra una superficie rocosa en cuyo extremo inferior izquierdo se puede encontrar una solitaria figura humana mirando hacia el horizonte, en el centro del sitio, se aprecia desgajamiento de las piedras así como una persona de pelo canoso observando y haciéndole una seña a una niña que se encuentra en la costa, casi junto a estas figuras, observamos 2 delgadas imágenes: un ser alado o angelus el cual parece que le esta dando o bien recibiendo de otro individuo inclinado un objeto parecido a un cazo.
Más al extremo inferior derecho se encuentra lo que fue una especie de fortaleza que ha sufrido el embate del tiempo encontrándose ligeramente destruida por su extremo inferior izquierdo, la sombra proyectada por la misma hacia el resto de la estructura también de colo café ladrillo da al resto principal gran resalte. Parece que la intención del Maestro es mostrar la imágen de tranquilkidad y a la vez de los personajes descritos, por un lado reales y por otro etéreos los cuales propician un pasaje de inusual transparencia pictórica y de un profundo sentido personal, íntimo del Artista.
Este es un discreto pero a la vez enorme tributo, como tantos que El Pintor realizo a uno de sus más trascendentales puntos de inspiración.
